A veces
queremos tantas cosas para nosotros, que nos olvidamos realmente de lo que en
verdad necesitamos, o bien, queremos hacer del tiempo y la vida un lugar a nuestra
medida.
Sin saber, que
somos esa gente a la que otros aman, esa gente con la que otros cuentan, gente a la que
otros necesitan, que somos gente que vive con gente. Y nuestros deseos deberían
estar forjados sobre los cimientos que otros han puesto para que nosotros nos
levantemos.
No quiero, y hoy menos que nunca. No quiero dejar de escribir en este blog.
Ni desaparecer, ni sentirme vacía nunca.
Pd.- Belén,
te agradezco muchísimo tus muestras de cariño, amiga mía.
Me alegra tu fuerza de voluntad.
ReplyDeleteAsí me gusta.
Besos.
¡SOMOS!¡SOMOSSS! Y SEREMOS AUN DESPUES DE LA MUERTE. ESPECIALMENTE ¡TU! AMIGA. UN SER LLENO DE TANTO AMOR NUNCA DEJA DE SER.
ReplyDeleteESPERO ESTES PASANDO UN LINDO DIA...
Hola, es lo que pasa muchas veces que no nos damos cuenta de que muchas personas dependen de nosotros, de nuestro cariño y que les hacemos mucha falta aunque sea solo para darles una caricia, espero que no dejes de escribir y mucho animo, si me lo permites te sigo, gracias.
ReplyDeleteSaludos.
Somos y seremos esa gente.
ReplyDeleteA ver si es verdad,y sigues deleitándonos con tus palabras.
ReplyDeleteQue alegría entrar y encontrarte :)
Un cariñoso saludo.